"El arte no es un refugio, sino una salida necesaria y dolorosa que debemos abrirnos a través del caos. " (Antonin Artaud)
Federico Ferrari encuentra en su doble faceta de artista visual y médico anestesiólogo el punto de intersección vital desde donde producir sus obras. A través de pinturas de pequeño y gran formato, aborda con valentía temas existenciales propios de la fragilidad de la condición humana con los que debe convivir diariamente en el ejercicio de su profesión. Pintar es a la vez búsqueda estética y catarsis, canal de expresión de infinitas posibilidades, espejo multidimensional donde su inconsciente aflora. “M87 [del enigma a la singularidad]”, expresa lo transitorio y lo fugaz de nuestra existencia, valiéndose para ello de uno de los grandes enigmas del universo: los agujeros negros. Catalogados como verdaderos monstruos cósmicos, estos objetos compactos de extrema densidad son el pretexto conceptual y metáfora desde donde el artista inicia su proceso creativo.
El corpus de obras que conforman esta exposición ha sido creado entre los años 2019 y 2023, pudiendo distinguirse en él dos ejes de representación definidos. En la serie “Agujeros Negros,” círculos irregulares, texturados y profundos se adueñan de la superficie del lienzo remitiendo al poderoso núcleo de estos fenómenos del Cosmos. Basados en la “Teoría de la Relatividad” del físico alemán Albert Einstein (1915), distintos expertos sugieren que el tiempo y el espacio se detienen allí, desapareciendo también todas las leyes físicas que conocemos. Esta región es denominada “singularidad”, Federico Ferrari se apropia de ella como epifanía del advenimiento latente de un vacío infinito.
En la serie “Discos de Acreción”, dinámicos anillos gravitacionales de paleta ocre y oscura arrastran con su pincelada grandes cantidades de materia en su centrífuga carrera. Haciéndose eco del polvo y el gas que orbitan estos objetos atraídos por la gravedad, circundan el inquietante corazón trazando una frontera imaginaria que separa el adentro del afuera, la existencia de la nada.
Contemporáneo en su tiempo y en la elección de las estrategias de su producción, el artista se embarca en una travesía estética basada en la libre experimentación. En ocasiones, su trabajo nos trae reminiscencias del movimiento informalista argentino de la década del 50. Esto se hace evidente en el uso de materiales no convencionales como alquitrán, lacas, areniscas y piedras que entremezcla con el óleo. Asimismo, la huella del gesto se convierte en elemento expresivo, haciendo visible una interacción corporal con su obra y añadiendo una dimensión emocional a través de su energía y movimiento. No obstante, su producción pictórica es atravesada por un fuerte interés exploratorio en distintos lenguajes, incursionando en el arte digital con programas de software a través de los que realiza piezas audiovisuales experimentales para las que trabaja en colaboración con artistas sonoros. Artaud, veía en el arte una salida posible del caos, Ferrari halla en su proceso creativo la forma de exorcizar una angustia existencial propia de su experiencia que resuena en el inconsciente colectivo. De esta manera, la incertidumbre de lo desconocido y la monstruosidad de la finitud encarnadas en inabarcables agujeros negros, serán los disparadores de una profunda reflexión de la que el espectador no podrá escapar.
Lic. Marianella Baladán
